(Caracas, 23 de mayo. Noticias24).- El mercado mundial de petróleo espera que la OPEP y otros productores, entre ellos Rusia, acuerden el próximo jueves en Viena prolongar hasta entrado 2018 el recorte de sus suministros de crudo con el fin de estabilizar el precio del barril.
Este jueves 25 de mayo, cuando ya empieza lo que se estima sea un verano muy caluroso, en Viena, se verán las caras los ministros de energía de cada uno de los trece países miembros de la organización. Pese a que la reunión estaba pautada desde hace más de tres meses, no ha trascendido la totalidad de la agenda que será discutida.
La mayoría de los especialistas habían concordado que este encuentro sería la oportunidad óptima, para conversar y negociar sobre algunos aspectos aún no definidos, relativos al acuerdo de extensión de recortes en la producción de crudo, en especial con Iraq, que ha exigido flexibilidad en los límites que se le han señalado como tope de producción.
El acuerdo original, establecido entre la OPEP y las más importantes naciones productoras de petróleo que no forman parte de la organización, culminaba este mes y, dados los muy interesantes resultados alcanzados, en términos de disciplina productiva y mejora en los precios, los líderes energéticos estimaron prudente explorar la posibilidad de ampliar el acuerdo, extendiendo su vigencia.
Existe un claro consenso entre los analistas que esta reunión será el marco propicio para formalizar y presentar al mundo, el acuerdo de ampliación alcanzado, luego de arduas y complejas negociaciones.
No es poca cosa el logro que se exhibirá como objetivo alcanzado. Se mantiene la cota de reducción en la producción, cercana al 1,8 millones de barriles diarios, pero adicional se prolonga el período de recorte, pasando de los seis meses originales a los nueve meses. Obvio, se mantendrá el novedoso mecanismo de monitoreo que se estableció durante el primer lapso de recorte y que mostró su efectividad. Pero adicional se adiciona un nuevo objetivo, el seguimiento cercan de la producción de esquistos, en especial del generado en EEUU.
Los vaivenes en los precios de los petróleos marcadores, han sido el vivo reflejo, durante este último mes de las tensiones que caracterizan el mercado de la energía. Por ello no han sido sorpresivas algunas acciones, realizadas y que aún se desarrollan, que intentan articularse para incidir en el resultado de la reunión.
La visita del presidente Trump al reino de Arabia Saudita, más que procurar una reducción de la tensión política que confronta en el ámbito interno, se ha valorado como una muestra de la preocupación que existe en EEUU por el acercamiento del reino Hachemita con el gobierno ruso. Ambas naciones, Rusia y Arabia Saudita, han sido las más involucradas en el acuerdo de retiro de barriles del mercado de energía.
Las expectativas que el establishment norteamericano se había establecido como objetivo a lograr, parecieran no haber sido alcanzados, por ello la reacción del gobierno norteamericano que ha anunciado, hoy martes, que pondrá a la venta la mitad de sus reservas estratégicas, con la excusa de reducir su deuda pública, sin embargo es fácil entender que ello lleva como propósito impactar a la baja los precios del petróleo.
De acuerdo a lo que ha calculado la empresa de análisis estratégico, Bloomberg, la mitad de esas reservas ascenderían a una cantidad cercana a los 350 millones de Barriles lo que le permitiría recaudar cerca de 500 millones de US$ en 2018 y llegar a los 16.000 millones de US$ en 2028. Esto se realizaría mediante la incorporación de 95000 barriles diarios durante los próximos 10 años.
Este lapso no es aleatorio, es el período que estima el gobierno norteamericano que tardará la activación de la capacidad de explotación de energía de las reservas petroleras que existen en las regiones de Alaska y el Ártico.
El efecto que la noticia produjo en el mercado del petróleo fue inmediato. Los precios que mostraban una clara tendencia al alza, se revirtieron y empezaron a caer. Obvio, este será un tema a considerar en la reunión de esta semana en Viena.
Los resultados que se concreten en esta reunión, serán en todo caso, uno de los problemas menores que deberá enfrentar el Sr. Trump. Ahora tendrá que considerar el efecto que su decisión provocará sobre las relaciones con los países de la OPEP; en particular con Arabia saudita, que está laborando, arduamente, para obtener un precio cercano a los 60,00 US$ por barril, que le permitirá balancear su presupuesto, altamente deficitario.
Asimismo, tendrá el Sr. Trump que enfrentar las presiones del Lobby, vinculado al fracking, que con precios a la baja, vuelven a perder competitividad y se tornan nuevamente en actividad en rojo. Adicionalmente, las reacciones de los grupos ambientalistas, auguran un verano que ya empieza, particularmente caluroso, por las movilizaciones y protestas con las que adornarán las calles de las principales ciudades norteamericanas.
from Venezuela » Venezuela http://ift.tt/2rxQQk4
Comentarios: