El vocero del gobierno, Trevor Mallard, dice que se decidió eliminar las menciones de Jesucristo de la oración, pero que están dispuestos a considerar cambiar la decisión.
Mallard dijo que la oración en su forma actual era "exclusiva", porque se refería al Dios de los cristianos, y excluía a las personas de otras religiones.
"Tiendo a tratar de ser inclusivo en lugar de exclusivo, y esa es la razón de la forma de la oración actualmente", dijo.
"Para poner a Jesucristo de vuelta en la oración, tendría que estar convencido de que es importante para un gran grupo de neozelandeses y no para ofender a otro grupo de kiwis", dijo Mallard.
Si bien muchos parlamentarios optaron por el status quo y por un enfoque totalmente secular, más de 500 personas se reunieron para alabar a Dios frente del Parlamento.
"Si la oración no indica a quien oras, entonces son meramente unas pocas palabras", dijo el ministro Alfred Ngaro, quien defiende el papel del cristianismo en la sociedad de Nueva Zelanda.
"El nombre de Jesús hace la diferencia porque tú y yo hemos visto el poder de la oración", dijo Ngaro, y añadió: "Si eliminamos a Jesús hoy, ¿que sucederá mañana?".
"No estamos aquí para protestar. Estamos aquí para proclamar el nombre de Jesucristo, alto y claro y que sea exaltado", dijo uno de los participantes.
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