Este martes los restos mortales de Aldrin Torres serán velados en Chirica, San Félix. Aunque Aldrin era de Tumeremo y su mamá, Noemí Salazar, estaba asentada en El Dorado, tenía raíces en Ciudad Guayana. El miércoles recibirá cristiana sepultura en Jardines del Orinoco.
Ahora bien, a pesar de que el caso ha estado rodeado de muchos pasajes oscuros, se tiene claro que quienes mataron a Aldrin Torres y a su esposa, Rebeca Núñez son profesionales.
Por ello, desde Caracas, a solicitud insistente del propio partido de gobierno, del que Aldrin Torres era ficha muy importante, ha sido enviada una comisión del Cicpc que será la que lleve adelante las investigaciones.
El gobierno nacional tiene tanto interés en resolver el caso que enviaron una antropóloga forense desde Barcelona, estado Anzoátegui, para que le hiciera el estudio forense a los cadáveres.
Se comentó con insistencia que el cadáver de Aldrin estaba incompleto pero la antropóloga forense demostró que no, que todo estaba en su sitio, sólo que ambos cuerpos mostraron señales de tortura porque sus captores tuvieron mucha precisión para causar daño.
A Rebeca además de tirotearla le golpearon la cabeza por eso el cráneo de ella está más astillado mientras a Aldrin le dieron dos tiros en la cabeza.
La reconstrucción ha ido permitiendo descubrir una serie de detalles, por ejemplo, que Rebeca murió primero que Aldrin, lo que significa que el dirigente político fue obligado a presenciar la tortura de su mujer, con la intención de castigarlo hasta lo indecible y posteriormente lo matan.
Por eso es que los pesquisas del Cicpc, presumen que se trata de unos sujetos con habilidades especiales para la tortura y que fueron contratados para cometer el doble crimen.
Algunas de las hipótesis de los analistas espontáneos han querido hacer ver que la víctima era en primer lugar Rebeca y que Aldrin murió porque estaba allí pero los investigadores señalan que si hubieran querido matar sólo a Rebeca esperan que salga de su trabajo y se la llevan, porque capturarla junto con el marido era mucho más riesgoso por lo que pudiera ocurrir.
La tesis central es que la víctima era desde el principio Aldrin Torres y que se los llevan de su casa porque ya les habían hecho seguimiento, por lo menos desde hacía un mes; por lo tanto conocían toda su rutina.
También los sujetos revisaron los correos, las columnas y monitorearon los programas de radio donde intervenía Aldrin Torres, lo que permite inferir que la muerte del dirigente político fue un encargo de las mafias del oro.
El gobierno nacional, por instrucciones del propio presidente Nicolás Maduro, está decidido a capturar a los sujetos que mataron a Aldrin Torres y a su mujer y si se tiene que ir hasta Colombia a buscar a los sicarios de la pareja, eso se hará.
También los pesquisas que vienen de Caracas serán los que realicen el trabajo nuevamente en el sitio donde encontraron el vehículo quemado y los dos cuerpos, que como se ha publicado en otros medios, no estaban quemados sino descompuestos, lo que permite inferir que los mataron el miércoles en la noche o en la madrugada.
También tienen claro los investigadores que esa no es la escena inicial del crimen, esa es la escena para la liberación pero la escena primigenia, la de la tortura y posterior asesinato fue en otro lugar.
Presumen los pesquisas que se los llevaron hacia el sur, en algún lugar aislado (lo que llama la atención es como los pasaron por las alcabalas), y que posteriormente los trasladaron, ya muertos, hasta San José, donde hicieron la parodia de la quema del vehículo.
Otra exigencia que el gobierno ha hecho a los investigadores es que quien aparezca relacionado con el crimen de Aldrin Torres y su mujer Rebeca Núñez, será puesto tras las rejas, pero advierten que el crimen será resuelto y sus asesinos capturados porque “no se puede permitir la colombianización o la mexicanización de la política en Venezuela.”
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