Humming es una técnica para practicar sexo oral muy placentera que mejorará tus relaciones sexuales y revolucionará tus coitos. El término proviene del inglés y significa zumbido o vibración. Consiste en realizar un pequeño sonido con los labios que vibran y causan mucho placer, mientras estás practicando sexo oral.
El sonido provoca pequeños zumbidos en los genitales y proporciona un plus de placer durante el sexo oral, explican los sexólogos.
¿Cómo practicar humming?
La idea es sacar el máximo partido a las cuerdas vocales haciendo vibrar el aparato fonador, imitando al mugido de una vaca o el popular «OM» que se utiliza en meditación.
Otro beneficio de la práctica es el cambio de temperatura generado a partir del aliento que sale del cuerpo y se enfría en contacto con el aire, creando una sensación agradable en el contraste.
Las partes ideales para practicarlo son el clítoris y el glande. Si quieres aumentar la intensidad de las vibraciones puedes crear tus propios sonidos, o acompañarlo con juguetes sexuales.
La puede practicar el varón o la mujer
En el caso del varón
La manera adecuada de realizarlo es tener los labios cerrados apoyados sobre la vagina al momento de hacer el zumbido. Al mismo tiempo lo combinas con movimientos de lengua diferentes: arriba, abajo, y en círculos.
En el caso de la mujer
El sonido lo debes realizar mientras tienes el miembro viril dentro de tu boca. El hombre experimentará un agradable cosquilleo que va a aumentar su placer a medida que el zumbido se intensifique.
Técnica plasmada en el Kamasutra
En realidad, no es algo nuevo sino una técnica que se encontraba en el kamasutra en el epígrafe IX del capítulo la unión sexual llamado: ‘del auparishtaka o unión bucal’. En este apartado describe 8 tipos de sonidos que se pueden realizar durante el sexo oral.
Aunque se trate de una técnica muy antigua se puede actualizar probando con juguetes, vibradores, geles lubricantes, y añadirles la utilización de las cuerdas vocales.
La práctica tal como indica el Kamasutra no es exclusiva para los genitales. También se puede probar en otras zonas erógenas como pueden ser la espalda, los senos, los testículos, y el cuello.
De esa manera gozarás de un orgasmo mucho más satisfactorio. ¿Te animas a probarlo?
Fuente: Nosotras
RA
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