Es cierto que la alimentación es pilar fundamental en el tratamiento de la diabetes. Los pacientes deben seguir cuidados rigurosos que les ayuden a controlar los efectos tanto de la enfermedad como de los medicamentos. Con la llegada de las fiestas navideñas, el paciente que padece diabetes suele deprimirse al pensar que no tiene oportunidad de compartir con la familia en las comidas de Noche Buena y Año Nuevo. Pero esto no es así. Al contrario, en la actualidad existen alimentos alternativos para preparar deliciosos platos dulces y salados, así como bebidas saludables, para que pueda festejar con salud y alegría. Por supuesto, compartir en familia en Navidad exige un alto porcentaje de autocontrol, decisión y fortaleza interior para no caer en la tentación de comer dulces, panes, consumir bebidas alcohólicas y dejar de lado las restricciones médicas.
Profesionales de la salud y especialistas, consideran que, los excesos en azúcar y grasa no están permitidos al paciente diabético. Una recomendación vital y siempre vigente es acudir al médico por lo menos antes de la llegada del mes de diciembre y solicitar asesoría sobre cómo sustituir un alimento de la dieta por otro en las fiestas navideñas, así como el alcohol y los postres.
Las carnes permitidas se deben comer a la plancha o asadas, combinadas con vegetales que el paciente puede aderezar con un poco de vinagre y realzar el gusto. Los criterios nutricionales son flexibles, pero se debe resguardar la salud. El paciente con diabetes puede comer una ración de pan, algunas galletas y pasteles pero en porciones pequeñas. Y estas comidas deben conllevar ejercicio físico, además de no descuidar los medicamentos que el médico ha indicado.
Por otro lado, actualmente el mercado ofrece una variedad de productos típicos de Navidad elaborados con el cuidado debido para diabéticos, celíacos, pacientes hipertensos, entre otros.
La presente nota se comparte dentro del eje de actividades de divulgación preventiva en salud llevadas a cabo por la Fundación Torres-Picón.
Las bebidas alcohólicas no están totalmente prohibidas para el diabético, pero la ingesta debe ser moderada. Si una persona sana toma tres copas de licor o vino, el diabético puede tomar una al día, ya que aportan calorías con las cuales no debe saturar su organismo. El baile es bienvenido en estas fechas como ejercicio físico ideal no solo para divertirse sino como aliado para mantener el peso ideal, mediante la eliminación de calorías.
Estas son algunas medidas para conservar la salud sin restringir el disfrute en las fechas decembrinas, propicias para compartir con la familia y los amigos, y sin necesidad de reprimirse o descuidar el control de la diabetes.
Igual en Navidad que a lo largo de todo el año, la prudencia, evitar los excesos y estar conectados con una cultura de vida saludable, tren beneficios al paciente notables y valiosos.
Hacemos un exhorto más para que cuidemos la salud y para que especialmente no desmayemos en la tarea de apoyar o impulsar medidas preventivas de la obesidad y el sobrepeso, que pueden conducir a la diabetes. Debemos pensar en los adultos mayores -hombres y mujeres- afectados y también considerar que nuestros niños y jóvenes pueden librarse, salvarse, de esta amenaza a la salud pública que con carácter de epidemia global se ha esparcido, comentó Pedro Torres Ciliberto, de la organización y fundación familiar Torres-Picón, enfocada en la prevención informativa del problema, así como en la promoción del arte, la cultura y la educación como medios para la superación personal y el desarrollo.
Felices fiestas !
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