La tripulación Vigilante de la Guardia Costera (WMEC-617) incautó un total de 122 pacas de cocaína, el lunes, en intercepciones consecutivas de embarcaciones rápidas cerca de la costa de Limón, Costa Rica.
La tripulación del helicóptero de la Guardia Costera MH-65 Dolphin, desplegada hacia adelante, a bordo del Vigilant, inhabilitó con éxito el primer barco de lanzamiento rápido y observó a la tripulación arrojando paquetes por la borda.
Una vez en escena, el equipo de abordaje descubrió a cuatro personas a bordo y recuperó 77 balas o aproximadamente 4,200 libras de cocaína del agua. Inmediatamente después de la primera interdicción, la tripulación del helicóptero y un equipo de abordaje separado fueron conducidos a una embarcación rápida de 34 pies con cinco personas a bordo.
La tripulación del helicóptero deshabilitó con éxito la segunda embarcación rápida y también observó a la tripulación arrojando paquetes por la borda. El equipo de embarque de Vigilant llegó a la escena, detuvo a cinco personas y recuperó 45 balas o aproximadamente 2,600 libras de cocaína del agua.
La cocaína recuperada durante ambas interdicciones tiene un valor mayorista estimado de aproximadamente $ 118.3 millones. Las nueve personas serán procesadas por el Distrito Medio de Florida y el contrabando confiscado será transferido a la Administración de Control de Drogas.
"Cada interdicción de alta velocidad de embarcaciones cargadas de drogas presenta desafíos únicos, por lo que para nosotros interceptar simultáneamente dos embarcaciones rápidas en medio de la noche es extraordinario”, dijo Cmdr. Fred Bertsch, oficial al mando del Vigilante. “Estoy muy orgulloso de nuestro equipo y no podría haberles pedido nada más. Estos esfuerzos, combinados con los de nuestras agencias y naciones asociadas , ayudarán a garantizar la estabilidad en el hemisferio occidental ”.
Una vez a bordo de un cortador de la Guardia Costera, todos los detenidos reciben comida, agua, refugio y atención médica básica. Durante la interdicción, los miembros de la tripulación de la Guardia Costera fueron equipados con equipo de protección personal para minimizar la posible exposición a cualquier posible caso de COVID-19. No se informó que los detenidos estuvieran enfermos o presentaran síntomas relacionados con COVID-19.
El 1 de abril, el Comando Sur de los Estados Unidos comenzó a mejorar las operaciones antinarcóticos en el hemisferio occidental para interrumpir el flujo de drogas en apoyo de los objetivos de seguridad nacional presidenciales. Numerosas agencias estadounidenses de los Departamentos de Defensa, Justicia y Seguridad Nacional cooperaron en el esfuerzo por combatir el crimen organizado transnacional. La Guardia Costera, la Armada, la Aduana y la Protección de Fronteras , la Oficina Federal de Investigación, la Administración de Control de Drogas y el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas, junto con agencias asociadas aliadas e internacionales, desempeñan un papel en las operaciones antidrogas.
La lucha contra los carteles de la droga en el Mar Caribe requiere la unidad de esfuerzo en todas las fases, desde la detección, el control y las interceptaciones, hasta el enjuiciamiento penal por parte de socios internacionales y las oficinas de fiscales de los Estados Unidos en distritos de todo el país. La fase de aplicación de la ley de las operaciones de contrabando en el Mar Caribe se lleva a cabo bajo la autoridad del Séptimo Distrito de la Guardia Costera, con sede en Miami, Florida. Las interdicciones, incluidos los abordajes reales, son dirigidas y realizadas por miembros de la Guardia Costera de los Estados Unidos.
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