El grupo armado se instaló en la comunidad indígena la tarde del martes 2 de febrero. Foto: Cortesía |
El informante detalló que los integrantes de la banda junto con los mineros llegaron en lanchas por los ríos Cuyuní y Chicanán y ahora pretenden instalarse para ejercer minería ilegal. Alertó que están armados y los más de 300 indígenas que están en ese territorio temen por sus vidas.
“La propia comunidad decidió hace dos años sacar a los mineros. Y ahora llegaron embarcaciones y pensamos que puede ocurrir una masacre porque los están amenazando con entrar a la fuerza, con el apoyo del grupo armado”, declaró.
La fuente dijo que las autoridades militares y civiles del estado Bolívar están al tanto de la situación.
“Les avisamos al gobierno porque es su deber garantizar la seguridad de nuestra comunidad. Pero si no obtenemos respuesta, nos tocará seguir resistiendo así como hemos resistido más de 500 años en nuestras tierras”, sostuvo, y agregó que de ser necesario, los aborígenes de las 22 comunidades del sector Cuyuní – Sifontes están dispuestos a movilizarse a San Luis de Morichal para apoyar a sus paisanos.
“Si ellos (el grupo armado) tienden un puente para conversar, podemos dialogar. Pero las amenazas que están haciendo desde esta tarde y parte de la noche, nos dejan claro que no quieren diálogo. Además, que ellos se instalen en el territorio no es algo que nosotros vayamos a negociar ”, indicó.
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