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| El hotel Venetur Orinoco, antiguo Intercontinental Guayana, contaba con 189 habitaciones y 465 plazas camas. | Foto: Archivo cortesía @veneturorinoco |
El inversionista principal es el empresario Rafael Oliveros, director del grupo La Marea y Miragua, una asociación turística que gestiona un club de playa homónimo, una fundación y dos hoteles boutique en Playa El Agua, Nueva Esparta. Oliveros también tiene la concesión para operar Campamento Canaima, en el Parque Nacional Canaima y White Comedor, un restaurante de lujo cerca de la torre de control del aeropuerto La Carlota, en Caracas.
Su nombre saltó a la opinión pública en febrero de 2022, cuando realizó una excéntrica fiesta por sus 50 años en el Kusari Tepuy, una milenaria meseta poco explorada y de vegetación protegida, en la Amazonía venezolana. La ONG SOS Orinoco denunció daños ambientales por esa celebración y el Ministerio Público abrió una investigación.
El monto a invertir es 7.000.000 de dólares, según confirmó el gobernador de Bolívar. Los trabajos de restauración se realizan a puerta cerrada, pues varios metros antes del hotel hay dos portones que, al menos hasta este sábado 4 de junio, permanecían cerrados y con funcionarios de seguridad.
Personas que conocen a Oliveros lo describen como alguien cercano a la exministra de turismo, Marleny Contreras. En noviembre de 2016, el empresario comentó, durante una entrevista al canal Globovisión, que viajó con Contreras a la Feria Internacional del Turismo, en Londres, para representar a Venezuela.
El Pitazo hizo una solicitud de entrevista al número de teléfono de Oliveros, para conocer detalles del proyecto en el hotel, pero no se obtuvo respuesta.
Estatización y deterioro
El Venetur, antes conocido como Intercontinental Guayana, fue intervenido y estatizado en el año 2010. A principios de 2018 fue clausurado y cedido a algunos cuerpos de seguridad, incluyendo las Fuerzas de Acciones Especiales (Faes), quienes tomaron las instalaciones y limitaron el acceso con portones y policías.
La estructura, enclavada en un extremo del río Caroní, en plena entrada de Puerto Ordaz, tiene una vista privilegiada a una cascada que da la sensación de estar en Canaima. Tenía un casino y un centro de convenciones. Contaba con 189 habitaciones y 465 plazas camas.
“Solicitamos al ministro de turismo la intervención en ese hotel para su reapertura, en una alianza con el sector privado. Para nosotros el hotel Venetur es el ícono de los hoteles del estado Bolívar. Un grupo de emprendedores, que dirige el compañero Rafael Oliveros, está al frente de esa reapertura”, explicó Marcano.
– Gobernador, ¿Cómo llega el empresario Oliveros a ser el inversionista principal del proyecto?
– El Estado venezolano está apostando a los empresarios que decidieron quedarse. Durante todo este tiempo, cuando mucha gente se fue del país y creyó que nos hundimos, él (Oliveros) creyó en Venezuela y se quedó trabajando en Margarita, Caracas y Canaima. Bueno, hoy, cuando comienza el crecimiento económico, bienvenidos los que se quedaron. Los que se fueron también pueden venir, pero tienen preferencia para nosotros, por su lealtad con el país, los que permanecieron.
– La inversión es grande…
– Sí, siete millones de dólares y quedará totalmente nuevo.
– ¿La estructura estaba muy deteriorada? En esa inspección previa, ¿cómo vio las instalaciones?
– Lo que pasa es que las modificaciones son con tecnología de punta, ha sido cambiado casi todo. Lo único que se mantiene es la visual que tiene, pero internamente hay un diseño moderno.
– ¿Habrá cambio de nombre del hotel?
No, es Venetur. Ese nombre no se lo puede quitar nadie.
Vale mencionar que el mandatario regional aseguró que apuesta por reforzar la estructura hotelera para lograr ser la región sede de la Vinotinto. También afirmó que el Venetur Orinoco servirá de hotel escuela para prestadores de servicio turístico.
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