Un grupo de jóvenes salió a las calles para evangelizar a la gente durante las dos últimas noches de celebración de Halloween. "Íbamos y veníamos toda la noche, alcanzando a cientos de personas con el Evangelio", dijo uno de los muchachos.
La Noche del Terror suele tener lugar todos los años durante Halloween en Walibi Holland, un parque temático en Biddinghuizen, Países Bajos. Jóvenes cristianos aprovecharon esta fecha para intencionalmente llevar luz en medio de la oscuridad.
“Nos dimos cuenta de que estas personas necesitan escuchar el Evangelio. A pesar de la oposición inicial de la policía, se nos permitió hacerlo”, informaron los jóvenes holandeses Dirk-Jan Troost y Jelthe Kloens, informó el sitio web Revive.
Según Troost, el grupo de jóvenes sabía que serían oprimidos durante su jornada evangelística, pero uno de ellos tuvo la "visión de un ángel" y se sintieron confiados. Los guardaparques querían mantenerlos alejados, pero eso no les impidió continuar con la misión.
“Al final, uno de los vigilantes del parque nos dio permiso, porque se dio cuenta de que estábamos allí solos para compartir el amor de Dios”, dijo. "Hemos estado entrando y saliendo toda la noche, el sábado y el domingo, alcanzando a tantos cientos de personas con el Evangelio".
Inicialmente, Dirk-Jan dice que la gente no quería escuchar el mensaje. Hasta que uno de los jóvenes del grupo comenzó a predicar públicamente y hubo un gran avance.
“De repente teníamos conversaciones muy agradables. La gente nos preguntaba '¿Quién es Jesús?' También pudimos distribuir muchos libros cristianos gratuitos con diversos de actualidad”, dijo.
Los jóvenes no solo hablaron del amor de Cristo, también oraron por muchos enfermos - una de las personas sanadas fue una mujer que sufría de dolor de cuello. Otra mujer incluso fue liberada, dicen.
“También vino a nosotros una mujer que conocía a Dios, pero se había apartado de Él. Ella dijo: 'Me gustaría reconciliarme'. Así que oramos con ella”, relataron.
Aunque algunos de los jóvenes del grupo tenían poca experiencia en evangelismo, todos fueron usados por Dios. “Fue genial verlos dar ese paso. Todos estábamos muy animados. Nos permitieron orar por veinte personas”, afirman.
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