Cd. Guayana(Especial) CNP: 5.564.- El obispo de la diócesis de Cd. Guayana, monseñor Carlos Cabezas, recordó que los cristianos y católicos se preparan para la celebración de la Semana Santa; de los misterios centrales de la fe: la pasión, la muerte y la resurección del Señor Jesucristo.
Invitó a la feligresía a vivirlos con intensidad y sobre manera a recorrer el mismo camino que hizo nuestro Señor Jesucristo, "para hacer experiencia del resucitado". Saber que Cristo murió por nosotros, que padeció por nosotros, pero que está vivo. "En esta Semana Santa, debemos tener a Jesucristo presente. Hagamos experiencia, que camine con nosotros, que murió por nosotros, por nuestros pecados, pero que está vivo", reiteró.
Misa en la catedral de Cd. Guayana
El obispo Carlos Cabezas, ofició la eucaristía el domingo 26/03/2023 en la catedral, en edificación, de Cd. Guayana, Juan Pablo II. Percibió una iglesia parroquial viva y animada. Impregnada de Cristo y su evangelio. Fue su primera visita.
Visita parroquias
Informó que desde su llegada a la diócesis de Cd. Guayana, donde va a cumplir dos meses como guía espiritual de la iglesia católica, ha estado visitando las parroquias. Fue al sur del estado Bolívar, exactamente a Las Claritas, El Dorado, Tumeremo, Guasipati y parroquias indígenas. Ha estado en San Félix y la catedral de Cd. Guayana, Juan Pablo II.
Irá a Upata
Adelantó que su propósito es tomar los tres primeros meses del año 2023 para visitar las parroquias, y que posiblemente después de la Semana Santa, Dios mediante, vaya a Upata a compartir la alegría de la fe con la feligresía.
Mensaje espiritual
Dijo que para los afligidos ahí está la palabra del Señor Jesucristo que nos tiende la mano. El Señor no nos deja que sucumbamos ante la desesperación, las dificultades; las circunstancias adversas que la vida nos coloca. El Señor te tiende la mano, y no podemos dudar jamás de que él está ahí para socorrernos. "La esperanza no defrauda dice el apóstol Pablo, y por eso es que debemos poner toda nuestra fe y nuestra convicción en la seguridad de que el Señor nos rescatará de donde estemos sumergidos".
(Miguel Bellorín).
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