Después de la resurrección, Jesús se apareció a varias personas, entre ellas María Magdalena, los discípulos y otros testigos. Les enseñó acerca de las Sagradas Escrituras y las cosas por venir. En Lucas 24:44-45, leemos: “Y él les dijo: Estas son las palabras que os hablé, estando aún con vosotros, que es necesario que se cumplan todas las cosas que están escritas acerca de mí en la ley de Moisés, y en los profetas, y en los salmos. Entonces les abrió la mente para que entendieran las Escrituras”.
Jesús también dejó en claro que su misión aún no había terminado. En Mateo 28:18-20, él dijo: “Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra. Id, pues, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles a observar todas las cosas que os he mandado. Y he aquí, yo estaré con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo”.
Durante los 40 días siguientes a su resurrección, Jesús se apareció varias veces a sus discípulos y otros seguidores. En Hechos 1:3 , leemos: “A los cuales también, después de haber padecido, se presentó vivo con muchas pruebas infalibles, siendo visto por ellos cuarenta días, y hablando del reino de Dios”.
Finalmente, llegó el momento en que Jesús ascendió al cielo. En Lucas 24:50-51, leemos: “Y los llevó hasta Betania; y, levantando las manos, los bendijo. Y aconteció que mientras los bendecía, se apartó de ellos y fue llevado arriba al cielo”. En Hechos 1:9-11, leemos: “Y mientras decía esto, fue alzado a la vista de ellos, y una nube lo recibió, ocultándolo de sus ojos. Y mientras miraban fijamente hacia el cielo mientras él subía, he aquí, dos hombres vestidos de blanco se pararon junto a ellos. ¿Quién les dijo: Varones galileos, por qué estáis mirando al cielo? Este Jesús, que ha sido tomado de vosotros arriba en el cielo, vendrá tal como le habéis visto subir”.
Así, Jesús cumplió su misión en la Tierra, muriendo por los pecados de la humanidad, resucitando y finalmente ascendiendo al cielo, dejando la promesa de que un día regresará. Su ejemplo y enseñanzas siguen inspirando y guiando a millones de personas en todo el mundo.
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