Upata. – Hoy se cumple un mes de la triste desaparición de un ser tan querido como lo fue Angelvis Guzmán, llamado cariñosamente como “gordito”, quien fue asesinado por una bala fría mientras dormía, producto de la inconciencia de personas o “gatillos alegres”, que, sin medir las consecuencias, acabaron con la vida de este hombre muy querido por sus familiares y amigos, dejando corazones rotos y un gran dolor que con el tiempo pasará, pero, su recuerdo vivirá en cada uno de los corazones de quienes aún lo quieren.
Habituarse a las situaciones de una vida sin compartir con “el gordo”, puede tomar meses o años, es posible que familiares o amigos, no sepan que decirle o cómo actuar, delante de aquella persona que fue muy importante para él, también hoy se recuerda como si fue aquel 18 de junio en horas de la madrugada, cuando con fe se le pedía en oraciones a Dios, que hiciera un “milagro” y se salvara Angelvis, sin embargo, El Señor, tomó otro rumbo de las cosas y a pesar de ser duro, así fue aceptada, por lo que, familiares piden FUERZAS Y FORTALEZA.
Sus hermanos, sus amigos, lo recuerdan como un ejemplar y sostén económico de la familia, además, de responsabilidades y siempre disponible con allegados, al momento de hacer favores, “fue buen hijo, hermano, sobrino, primo y amigo, siempre será recordado como aquel muchacho con una sonrisa en su cara, sus chistes y todo aquello bonito que brindó, sin esperar a recibir nada a cambio, así fue el GORDO….”, indicaron sus familiares.
Esta pérdida afecta aún a las familias de Angelvis, donde cada una la experimenta en forma diferente, esta muerte causó un dolor profundo, golpe y confusión, a lo que puede dar lugar a largos periodos de tristeza y depresión. La familia del difunto, solicita una vez más a los cuerpos de seguridad, dar con el paradero del o los responsables de su muerte.
📝Indira Zamora
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