El gobierno de Nicolás Maduro demostró su temor ante un símbolo de paz y resistencia: un tanque de cartón. Durante las protestas pacíficas del 17 de agosto en el estado Carabobo, a Mabel Meléndez, la joven creadora de este ingenioso artefacto, la detuvieron las fuerzas del orden, un acto ampliamente criticado y comentado en las plataformas digitales.
El tanque de cartón, decorado con palabras como “Paz”, “Dignidad” y “Confianza”, se convirtió en el centro de atención de la protesta, reflejando el clamor de una población que busca un cambio hacia una Venezuela más justa y libre. La incautación de este símbolo y la detención de Meléndez no solo se ve como una represión a la libertad de expresión, sino también como un testimonio del temor del gobierno ante cualquier forma de resistencia, por pacífica que sea.
Impacto del tanque de cartón
Según posts en X, la detención de Meléndez y la confiscación del tanque fueron realizadas por funcionarios de Policarabobo, quienes no solo se llevaron el vehículo de cartón, sino que también detuvieron a dos vigilantes de la residencia de Meléndez, en un claro intento de intimidación. Sin embargo, la liberación de Mabel Meléndez, reportada poco después, se asume como una pequeña victoria para la resistencia civil, aunque el mensaje de represión sigue resonando.
Este evento se interpreta por muchos como un reflejo del estado de Venezuela bajo el gobierno de Maduro, donde un acto simbólico de protesta se asume como una amenaza. La comunidad internacional y organizaciones de derechos humanos han mostrado interés en este caso, viendo en la detención de Meléndez y la incautación del tanque una muestra más de la falta de libertades y el control excesivo del gobierno.
La historia de Mabel Meléndez y su tanque de cartón es un nuevo símbolo de la lucha venezolana por la libertad, demostrando que la creatividad y la resistencia pueden surgir de las formas más inesperadas.
📝Nicmer Evans/ PuntoDeCorte
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