Caracas, 15 de enero de 2025 - Las actividades mineras ilegales en el Arco Minero del Orinoco han tenido un impacto devastador en la Amazonía venezolana, con la pérdida de al menos 140,000 hectáreas de bosque, según informó la organización SOS Orinoco.
Cristina Burelli, representante de SOS Orinoco, explicó que estas actividades extractivas no solo afectan los ecosistemas, sino que también ponen en riesgo a las comunidades indígenas que habitan la región. "Las cuencas de los ríos y las reservas hidrográficas de la Amazonía venezolana están siendo amenazadas por la deforestación y la contaminación provocada por la minería ilegal", señaló.
Burelli denunció que, a pesar de los riesgos, las autoridades no han logrado frenar la penetración y acción de grupos irregulares que realizan prácticas mineras dañinas. Además, criticó que la Ley Orgánica de la Mega Reserva de Agua Dulce y Biodiversidad del Sur del Orinoco y de la Amazonía venezolana, aprobada en 2018, aún no ha sido publicada.
Los pueblos indígenas pemón y yanomami son los más afectados por esta crisis socioambiental, enfrentando problemas como desplazamiento, aumento de casos de malaria y muertes por violencia relacionada con la minería ilegal.
La organización SOS Orinoco hizo un llamado urgente a las autoridades venezolanas para que tomen medidas efectivas para proteger el delicado ecosistema amazónico y garantizar los derechos de las comunidades indígenas.
📝Con información de El Nacional
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